AYUNTAMIENTOS Y PACTO LOCAL
Tal vez donde más se ve la crisis es en los ayuntamientos. El pago de nóminas se está haciendo imposible para algunos de ellos. Los ingresos y los gastos no cuadran y el déficit aumenta. La maquinaria administrativa se ha aumentado de tal manera que aquello de “vivir de la olla grande” ya es insoportable. La administración local hace aguas, sobre todo por la cantidad de personal que hay que pagar. Simplificando el análisis podemos decir que existen administraciones del estado, autonomías y ayuntamientos. Estos son los más cercanos a los ciudadanos. Sin embargo, a pesar de que son los que más servicios tienen que afrontar, son los que más carecen de recursos económicos.
El Pacto Local debería haberse producido hace muchos años. Pero, sabemos que el fondo estatal para los ayuntamientos se redujo en los Presupuestos Generales del Estado para el 2009, como se había anunciado en el 2008. El entonces Ministro Solbes cerró el grifo a los ayuntamientos, en una tensa reunión, en la que se reduciría aún más el fondo estatal para los municipios. En ese año la situación económica de las corporaciones locales en general empeoró porque la crisis de la construcción repercutió en los ingresos de urbanismo, en las licencias municipales, en el impuesto de construcción e instalaciones y en la tributación local que, en buena medida nutre a las arcas municipales.
Ya desde 2008 bastantes ayuntamientos empezaron a encontrar dificultades para pagar las nóminas y algunos se plantearon presentar expediente de regulación de empleo. Pero fue imposible llevarlo a efecto porque los intereses personales y familiares entraban en conflicto para que no les afectara a quiénes entraron a formar parte por influencias, sin tenerse prefijada una plantilla suficiente, eficaz y con especificación del cuadro de personal necesario. Además de la crisis, también los Planes de Ordenación Territorial, que en Andalucía han sido varios, con su lentitud burocrática frenaron el urbanismo.
Una vez acordada la financiación autonómica, era de esperar que se siguiera con la negociación para llegar a acuerdos de financiación para los ayuntamientos, pero el Vicepresidente de Política Territorial declaró que esa financiación de los ayuntamientos se retrasaría hasta el año 2011. Pero, la petición para que el Sr Chaves compareciera ante el congreso fue rechazada en la Diputación Permanente por los votos de PSOE, CIU y CC.
El Pacto Local es una asignatura pendiente desde años, desde el comienzo de la Democracia, y es debido a que las Comunidades Autónomas no han querido comprender que los recursos económicos son para prestar servicios a los ciudadanos y no para “fabricar administraciones burocráticas sobredimensionadas”. El momento es grave para los ayuntamientos y como contagio para el Estado porque, si ha habido acuerdo con las Comunidades Autónomas, se hace más urgente el acuerdo sobre la financiación local.
Ahora, de ninguna de las maneras se debe seguir permitiendo que las Autonomías negocien para conseguir ellas los recursos económicos y después ellas cierren el grifo a los ayuntamientos, limitándose a permitir o provocar que los ayuntamientos suban los impuestos a los ciudadanos como ocurrió en Algeciras con el Catastrazo. Y para que los recursos económicos lleguen con justicia a los ciudadanos se hace necesario establecer una mesa de negociación en la que entren en juego el Estado, las Comunidades Autonómicas y los Ayuntamientos.
El Pacto Local será sencillo si se transfiere a las corporaciones locales competencias y financiación suficiente del Estado y de las Comunidades Autónomas. Y no se trata sólo de financiar los servicios que se traspasen, sino de proporcionar recursos para que las corporaciones locales puedan desempeñar su autonomía constitucional.
Juan de Dios Regordán Domínguez
juandediosrd@hotmail.com